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martes, 24 de marzo de 2009

24/03/2009


Feriado, laburando, uno diria que lo meo una manada de elefantes que tomaron te verde, pero no. Estoy sola en la row y en la radio hay una seguidilla de canciones 100% buenas (no escucho la radio Pop, ni Kabul, ni esas cacas de vaca.)
 Asi canto y bailo y nadie me ve.

La formula matematica de las relaciones sociales es una equivalencia; mientras mas personas conoces, mas favores haces, mas se agarran de tu codo, mas te piden.
 Por eso tal vez, mis amigos son 3 que nunca manguean y en mi familia colaboro con mi hermana (gran ejemplo de las personas que se agarran del codo y ENCIMA delegan tu dinero)

Por ejemplo mis papas y mi hermana y yo. Yo nunca les doy nada, entonces cuando me piden es poco y de vez en cuando, encima no les hablo mucho porque laburo/duermo. 

Cuando mi hermana provee el dinero, le piden que haga las compras del mes, que le compre a mi mama alguno de sus muchos caprichos que le duran un mes antes de venderlo por De Remate, pague algun que otro impuesto o repuesto del auto.

Y asi, mientras mas sociable, mas mangueado... Como a mi no me gusta pedir favores nunca igualaria la balanza, asi que se deja asi.

Otra cosa es la "mojigatez" con la que se piden los favores, ya sea en el trabajo o en la vida:

"se apela a su solidaridad", "es necesario la colaboracion de todos" (unos pocos), etc., etc, eso es MENTIRA, nadie lo cree, es tipo el spam del visitante 99,999, que nadie cree pero 1 vez en 100000 alguien cae.
 
En la vida real la gente antecede el pedido con un arte que maneja una charla super, tal vez demasiado interesada acerca de la persona que se va a manguear (muchos halagos), seguida por el mangueo en si y un torrente de la accion de llorar miseria, inflalible.

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